Mucho se ha hablado sobre “realidad”.  Pensamos que la realidad es aquello que sentimos, tocamos, vemos, u oímos.  Pero si fuese tan simple así, todos verían apenas una realidad y no habría discordia ni discusiones a respeto de ella.

Si hasta el esposo y esposa son capaces de mirar para la misma situación y ver dos “realidades” completamente diferentes, entonces es posible que haiga 7 billones de realidades diferentes en el mundo.  Cada persona tiene la suya.

El versículo en Hechos 12:9 habla de la reacción de Pedro delante de lo que sucedía con él mientras la iglesia oraba. Un ángel vino a rescatarlo de la prisión y de la muerte. Y cuando Pedro salía de la prisión, “sin saber si lo que el ángel hacía era realidad; más bien pensaba que veía una visión.”

Pedro no sabía “que era real” lo que el ángel estaba haciendo. Estaba aconteciendo, pero el aun no se había dado cuenta.  Parecía ser un sueño.  Para sus sentidos humanos, aquello no podría ser “real”.

A veces entramos en depresión, en desespero, caímos en la tristeza, nos exasperamos, somos inundados por un vendaval de emociones negativas provocadas por nuestros sentidos. Pero si paramos un poco y pensamos; si nos preguntamos, “¿Cuál es la realidad aquí según DIOS, y no según lo que yo siento?”- la respuesta será bien diferente.

Usted puede pensar que su realidad actual es caótica, horrible, sin solución.  Tal vez hasta el deseo de morir pasa por su cabeza como reacción a esta “realidad”.

Pero si usted ora, o incluso si  alguien está orando por usted, usted puede no saber y ni sentir que la “real realidad” es que Dios ya está trabajando entre bastidores para librarle de esta situación.

Por lo tanto, salga de esta prisión de sentimientos y emociones horribles.  Siga este ángel de Dios. Cuando usted menos espere, su realidad será otra.

P.S. Y si no hay nadie orando por usted, yo oro ahora para que todos los que lean esto sean rescatados por un ángel de Dios de todo el mal que les rodea en este momento.  ¡Sea bendecido!