thumb do blog Renato Cardoso
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3 PRÁCTICAS QUE ESTRECHAN SU RELACIÓN CON DIOS

¿Cómo está su relación con Dios? Esta es la relación más importante de su vida, porque es la que determina su eternidad

¿Cómo está su relación con Dios? Piense en la pregunta y analice muy bien la respuesta.

Su relación con Dios es la que determinará no solo su calidad de vida, sino la paz de espíritu, o la falta de esta, aquí en la tierra y en la eternidad.

Así como en las relaciones humanas, cuando queremos tener la compañía de las personas que amamos, primero debemos dar amor. Nadie recibirá el favor de los padres si toda su vida los atacó. De la misma manera, tiene que arreglarse con Dios.

El Señor Jesús dijo: «El que cree en el Hijo tiene Vida Eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él», Juan 3:36.

Imagine lo que es tener la ira de Dios permanentemente sobre usted. Le garantizo que no quiere eso para su vida. Si el diablo se aíra con usted, Dios lo librará, sin embargo, si Dios Se aíra con usted ¿quién lo librará?

Imagine que alguien recibe un lindo regalo y lo arroja al suelo y, mirándolo a los ojos, le dice: «¡No quiero este regalo!». Esto es lo que las personas han hecho con el Hijo de Dios, que es Su representante para salvarlas de la ira, como consecuencia de la vida equivocada de ellas mismas. Nadie vivirá una vida sin consecuencias. Todo lo que plantamos, cosecharemos, y, cuando la persona tiene una acción contraria a Dios, Su reacción también la será, porque Lo despreció.

Quiero sugerirle que se arregle con Dios aquí y en este momento, o cuanto antes. Si lo hará, hágalo en donde está. No postergue esta decisión, hágalo mientras hay tiempo. La puerta se está cerrando, hemos visto señales en el mundo, en la naturaleza. Dios está dejando las señales bien claras.

No habrá justificación que pueda darle a Dios. Ante Él, nuestra justicia es un trapo de inmundicia, como lo afirma la Biblia.

Usted debe priorizar su alma. ¿Y cómo hace eso? En primer lugar, debe poner su relación con Dios por encima de cualquier cosa o persona. Tiene que ser el primero asunto en su vida.

Luego, debe escuchar la Palabra de Dios, lo que Él le dice, no lo que un pastor o una ideología dice. Conozca la Palabra de primera mano. Medite en ella, no es estudiar la Biblia para incrementar conocimientos, sino leerla con la humildad de quien desea aprender.

Y, por último, ponga en práctica lo que Dios le está pidiendo. Si le está pidiendo que abandone un pecado, obedezca. Esto es fe. Jesús elogió la fe de un hombre que sabía obedecer, el centurión que Lo buscó (lea Mateo 8). Ponga su voluntad en segundo lugar y la de Dios en primer lugar.

La relación debe basarse en agradar al que usted ama, así como buscamos agradar a nuestro padre, nuestra madre, nuestra esposa, nuestro marido, nuestros hijos. No es una buena idea, es una realidad.
A través de este mensaje piense al respecto.

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Colaborador

Obispo Renato Cardoso