31/07/2023

La historia de Gedeón – parte 21

Contra los desprevenidos

Contra los desprevenidos (Jueces 8:5-12)

Persiguiendo a los reyes de Madián, Zeba y Zalmuna, Gedeón entra en combate con los hombres de Sucot y de Peniel, que no creen en él y que les niegan pan a los 300. Indignado, amenaza con buscarlos cuando regrese. Zeba y Zalmuna estaban con quince mil hombres restantes, y Gedeón solo con 300.

Aun así, Gedeón logra herir al ejército, capturar a los reyes y el resto del ejército huye. Es interesante el porqué de que Gedeón haya logrado herir a esos hombres: “… y atacó el campamento cuando el campamento estaba desprevenido”.

Con certeza, el propio Dios hizo que los enemigos estén desatentos. No sirve ser un ejército, no sirve haber sido bien entrenados, no sirve ser la mayoría, no sirve ser quince mil. Si están desprevenidos, serán atropellados. Un motivo más para no estar asustados por el tamaño de los problemas o por el número de enemigos, o el poder de quien nos persigue.

Si Dios está con nosotros, Él mismo puede crear una situación que haga cesar las fuerzas que son contrarias a nosotros. Una vez más llama la atención la grandeza de Dios y cómo podemos tener la certeza de la victoria cuando Él está en batalla por nosotros.

Gedeón y los 300, sin embargo, estaban en alerta. Así también debemos estarlo, por eso Dios nos orienta a vigilar. La lección es muy clara: la vida es una guerra. Quien esté desprevenido pierde.

Continúa mañana…

¡No se lo pierda!

Lea también:

– La historia de Gedeón – parte 1

– La historia de Gedeón – parte 2

– La historia de Gedeón – parte 3

– La historia de Gedeón – parte 4

– La historia de Gedeón – parte 5

– La historia de Gedeón – parte 6

– La historia de Gedeón – parte 7

– La historia de Gedeón – parte 8

– La historia de Gedeón – parte 9