¿JUNTANDO LOS PEDAZOS DE SU VIDA?
¿Ya escuchó hablar del Kintsugi o Kintsukuroi? Son los nombres de un arte japonés que tiene como objetivo reparar las vasijas rotas o rajadas con oro. Al unir los pedazos con oro, la vasija que antes tenía un defecto termina convirtiéndose en una obra de arte, mucho más valiosa que cuando estaba entera.
No solo a causa del oro, sino también porque, según la tradición japonesa, hay más valor en algo que tiene una historia que en algo que no tiene nada que contar.
Este arte japonés tiene mucho que ver con la Palabra de Dios, porque somos una vasija humana, comenzando por el hecho de que vinimos del barro. Siendo así, todo el mundo tiene dentro de sí la historia de su vida, su infancia, sus conquistas, sus dificultades y sus traumas, y en esta trayectoria acumulamos muchas «rajaduras».
Cuando usted mira hacia su vida, hacia su vasija, ¿su pasado aún le trae dolor? ¿Usted tiene vergüenza de hablar de los errores que ya cometió? Tranquilo, hay una manera de resolver eso, sepa que el oro que viene de Dios también puede arreglar esas «rajaduras».
¿Quiere saber cómo? ¡Vea este video completo! Y sepa que, independientemente de lo que usted ha hecho o haya sido, no hay nada que Dios no pueda arreglar. Después de todo, ¡Él mismo prometió que haría nuevas todas las cosas!
«Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, Yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.» Apocalipsis 21:5