thumb do blog Renato Cardoso
thumb do blog Renato Cardoso

¿LE ENTREGÓ SU FUERZA A ALGUIEN?

¿Ya le entregó sus fuerzas a alguien y no le dio resultado? Sin embargo, hay alguien a quien, si usted Le confía su fuerza, Él lo fortalecerá y lo ayudará, en vez de destruirlo o descartarlo

¿Por qué no debe darle sus fuerzas a nadie? ¿Entregar sus fuerzas a otra persona (o personas)?

En Proverbios 31, versículo 3, dice: «No des a las mujeres tu fuerza…».

Antes de que usted, mujer, sienta algo en el estómago (porque habla de la mujer), quien dio ese consejo fue una mujer, fue la madre del rey Lemuel, que le dijo a su hijo: «No les des tus fuerzas a las mujeres». Fue la mujer la que habló de la «mujer virtuosa» (Proverbios 31:10), que, a pesar de virtuosa, si le entregas todas tus fuerzas, te convertirás en su mascota y te tendrá en la palma de su mano.

Naturalmente, cuando usted ve toda las Sagradas Escrituras, entenderá que eso no se resume solo al hombre con respecto a la mujer. Que una mujer le entregue sus fuerzas a un hombre también es nocivo. Pero hay una peculiaridad en el hombre que le entrega su fuerza a la mujer.

Entendamos lo que significa en este sentido bíblico. «Darle la fuerza a alguien» significa que usted somete su vida a las voluntades de ese alguien. Es decir, esa persona se vuelve como su «dios», su guía, su maestro, por así decirlo. Lo que esta persona quiere, lo que ordena es ley para usted.

También significa hacer que alguien sea su razón de ser. Sin esa persona, usted no tiene razón para vivir.

A veces, usted ve noticias de personas que, cuando pierden a la persona amada, pierden a un ser querido, se matan, ya no tienen razón para vivir.

Hubo un caso en Estados Unidos de una millonaria que perdió a su marido y a sus hijos en el terremoto de Turquía. Cuando recibió la noticia, simplemente no lo soportó. Según relatos, corrió literalmente a la sala de su casa, de su departamento y se suicidó. No quiso vivir más, porque perdió la razón de vivir.

También podemos decir que «darle la fuerza a alguien» es hacer de ese alguien el centro de su vida. Todo es sobre esa persona. Se ve mucho esto en el mundo de los fans e ídolos. Hay fans que ponen a sus ídolos (cantante, artista, jugador de fútbol, actor, grupo musical) en el centro de su vida. Como vimos a una fan de una famosa cantante que vino recientemente a Brasil, que se colocó un pañal para adultos para poder quedarse en la fila.

Entonces, vemos que esto ocurre con el ser humano. Pero ¿por qué ocurre esto? Porque Dios creó al hombre dispuesto a adorar.

El hombre tiene una inclinación a la adoración. Esto fue puesto en el corazón del hombre para que quiera buscar algo o a alguien superior a él. Y que en esta búsqueda encuentre al Único digno de esta adoración que es el propio Creador. Fue Dios Quien puso eso en nuestro interior. Él es el Único digno de corresponder de manera saludable a esa inclinación.

Cuando el ser humano no satisface esta necesidad de adorar con su relación con Dios, pone a alguien o algo en ese lugar.

El primer mandamiento que Dios dio en el Monte Sinaí cuando Moisés recibió las tablas de la ley, los diez mandamientos, fue: «No tendrás otros dioses delante Mí».

Dios dijo eso porque sabía que los seres humanos tienden a adorar cosas y personas.

De esta manera, esa otra persona robará las fuerzas de ese adorador. ¿Entendió? Entonces, hay muchas personas que se quejan, padeciendo, llorando de sufrimiento emocional por poner a alguien en el lugar de Dios.

Hay un hombre que, antes de entregarle su fuerza a la mujer, era un león. Pero ahora se convirtió en un ratoncito. Y recuerdo a un empresario que se enamoró de una prostituta. Él le dijo: «Te sacaré de esta vida». Esta es una historia real. Entonces, la mujer se fue a vivir a la casa de él y le fue quitando todo. Finalmente, lo dejó y volvió a su antigua vida. Ese hombre ya no podía trabajar, su empresa estaba yendo a la quiebra. Obispo Macedo

Y también hay muchas mujeres que les entregan sus fuerzas a los hombres. Hay personas que se apegan a un político como si este fuera un salvador. Hay quienes se apegan a una ideología.

Por lo tanto, tenga cuidado. Porque, quizás, ya le entregó sus fuerzas a alguien o a algo.

Dios es el único que no sacará ventaja de nosotros. Y es el único que puede corresponder a esa entrega, devolviéndonos más fuerza.

¿Sabe lo que ocurre con usted debido a que Dios es tan puro, poderoso, amoroso, cuando Le entrega sus fuerzas? Se vuelve más fuerte.

Vea el mensaje completo en el siguiente video.

imagem do author
Colaborador

Obispo Renato Cardoso