Dios puso la fe dentro del ser humano y, cuando este no conoce a Dios, crea dioses para sí mismo. Finalmente, debe hacer algo con la fe que Dios puso en su interior.

El ser humano tiene esa inclinación, incluso cuando dice ser ateo, afirma que cree en la ciencia. Lo que es muy gracioso porque Dios es la fuente de la ciencia. Es como decir: «creo en la Mona Lisa, pero no en Leonardo da Vinci».

Entonces, cuando la persona no cree en Dios, cree en cualquier cosa como en Papá Noel. Y eso no es cosa de niños, hay muchos adultos que creen en eso. En esta época del año, muchas personas se dejan llevar por las olas de las tradiciones y culturas, sin saber lo que conmemoran.

Cada uno de nosotros carga con la tendencia de crear dioses para sí mismo. Si el Padre demora un poco en atender, enseguida vamos detrás de alguien que resuelva nuestro problema: dinero, universidad, médicos, entre otros.

A causa de esa inclinación humana, el primer mandamiento que Dios le dio al pueblo de Israel por medio de Moisés se deshizo de las creencias y culturas vacías, que los conducía lejos del Creador.

«No tendrás otros dioses delante de Mí», fue el consejo que Dios le dio al pueblo.

Y solo bastó que Moisés demorara un poco en el monte Sinaí para que inmediatamente hicieran un becerro de oro que los llevara a la Tierra Prometida. Es contra eso que debemos guardarnos.

Entienda más sobre este asunto con el siguiente video.