SEA USTED: EL PEOR CONSEJO QUE PUEDE RECIBIR
Huya de ese consejo de las personas que lo rodean, pero siga el consejo que está en la Biblia, ahí sí será exitoso
Uno de los peores consejos que puede recibir y seguir en esta vida es: «Sé tú mismo». El mundo estampa este consejo en la ropa, en las redes sociales, en las canciones, y, con mucho orgullo, dice: «Tú debes ser tú, eres único». Es una palabra supuesta para motivar a alguien, para liberarla de seguir a otros.
Entiendo su lado de no preocuparse en mirar la vida de los demás intentando imitarlos.
Es común que un joven tenga ídolos, personas a las que admira, que cree que tienen éxito. Entonces, empieza a imitarlos (en el pelo, la forma de vestir). El resultado de eso es que la mayoría de los jóvenes son copias. Incluso los que dicen: «Yo soy yo mismo», pero no son conscientes de que están copiando a alguien.
Es imposible que alguien sobreviva sin imitar lo que se ve en las personas en algún nivel, de alguna forma. Esto no es necesariamente malo. Está escrito: «Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados», Efesios 5:1. Es común que un hijo, cuando es niño, quiera imitar al padre. Quiere usar la misma ropa, alentar al mismo equipo de fútbol. Sin embargo, cuando deja de ser niño y es adolescente, quiere hacer lo contrario al padre. Descarta las cosas del padre. Este es el camino común que siguen las personas. Y el adolescente empieza a tener problemas, porque no imita al padre (que es maduro y lo ama) y empieza a imitar a los compañeros de la escuela.
Nosotros fuimos creados a imagen y semejanza de Dios. La palabra «cristiano» significa que somos imitadores de Cristo, porque Él es el patrón de perfección, el ejemplo de todo lo que una persona debería anhelar ser.
Entonces, no es un error imitar al Creador. El problema es imitar a alguien que ni siquiera sabe lo que hace de su vida y solo quiere ser una moda, tener seguidores.
Retomando el consejo «sé tú mismo», ¿por qué es uno de los peores consejos que podemos recibir? Piense un poco: «Yo debo ser yo. Pero ¿quién soy yo?, ¿qué hay en mi interior?». Sabemos, por la Palabra de Dios, que en nuestro interior está exactamente lo contrario de lo que debemos imitar. Dentro de nuestro corazón están los malos pensamientos, el adulterio, las maldades, los celos. Porque ya nacemos con esa herencia de pecado dentro de nosotros. Entonces, si exteriorizo eso, seré insoportable, destruiré vidas, seré orgulloso, todo lo malo. Y eso no me dará felicidad.
Por eso, seguir este consejo es lo peor que puede hacer. Usted debe entender que no es igual, pero no está en un patrón en el que no necesita mejorar. Debe buscar imitar a Dios (en carácter, en pensamientos, en objetivos). ¿Qué haría Jesús si estuviera en su lugar? Imite a quien es digno de ser imitado.
Reflexione y vea el mensaje completo en el siguiente video.