Muchas personas dicen no querer involucrarse con nadie porque están traumadas para amar. Sin embargo, el ser humano fue programado para amar y eso está en sus cinco sentidos.

Cuando te das cuenta del significado de los cinco sentidos, ves que no existen de manera aislada.

La vista que Dios nos da está relacionada con la apreciación de la belleza, una de las primeras cosas que nos atrae de una persona es su apariencia, su manera de comportarse, que se nota por los ojos.

La audición: muchas personas se enamoran del tono de voz de otra persona, del contenido de su conversación.

El olfato: ¿a quién no le gusta sentir el olor de la persona amada?

El gusto: ¿a quién no le gusta comer en compañía de alguien? ¿Cuál es el placer de comer solo? Prácticamente ninguno. Pero, cuando conocemos a alguien, inmediatamente queremos tomar un café, almorzar o cenar con esa persona. Queremos disfrutar de uno de los mayores placeres de la vida, que es comer con alguien a quien amamos.

Pero, para mí, el último es el principal de todos: el tacto. El ser humano fue creado con el sentido del tacto, tenemos la habilidad de sentir el toque y de tocar, de sentir cuando tocamos. Y tenemos ese deseo de tocar a alguien, de sentir el calor humano, de sentir a la persona tocando nuestro cuerpo.

Entonces, naturalmente, si estos sentidos van a ser satisfechos, es necesario que haya una relación amorosa con otra persona, después de todo, no irás por ahí tocando a las personas aleatoriamente, ¿verdad?

Por lo tanto, los sentidos humanos delatan que fuimos creados para relacionarnos. Y, claro, cuando una persona tiene alguna resistencia a una relación es porque tuvo algún trauma, una mala experiencia, una mala referencia. Por lo tanto, termina inhibiendo todos los sentidos naturales cuando dice que no quiere relacionarse con nadie.

Presta atención: cuando no inviertes en tu vida amorosa, cuando no desarrollas una relación saludable, estás luchando contra tu propia naturaleza y, por eso, hoy existen tantas personas mental y emocionalmente enfermas. ¿Por qué? Porque los propios sentidos de las personas no están siendo satisfechos.

Pero Dios creó al ser humano para estar en buena compañía y Él es quien hace que eso suceda, por eso su Palabra dice:

«Dios prepara un hogar para los solitarios…» Salmos 68:6
«… No es bueno que el hombre esté solo…» Génesis 2:18

Entonces, cuando estás alineado con la voluntad de Dios, puedes contar con Su ayuda. Cuando te rebelas contra el amor, te estás rebelando contra Dios, contra tu propia naturaleza. Quien sufre en una mala relación anhela estar solo y es totalmente comprensible. Pero esa soledad es un alivio temporal, después comienzas a sentir todas las carencias y necesidades que tus cinco sentidos exigirán de ti.

Por eso, en la Terapia del Amor, que se realiza todos los jueves en el Templo de Salomón, les hemos enseñado a parejas y a solteros a invertir en esta área de sus vidas y obtener un resultado positivo. Para más información, haz clic aquí.

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